En un acto lleno de esperanza y determinación, estos jóvenes han utilizado una red de pescadores como lienzo para expresar sus pensamientos, frases, lemas y deseos de poner fin a la violencia machista, acompañados por el equipo de gobierno de Conil. Las paredes del Ayuntamiento se convirtieron en testigos de sus palabras cargadas de empatía y anhelo por un mundo más justo.
El momento culminante fue la lectura del manifiesto, donde cada estudiante tuvo la oportunidad de compartir sus reflexiones y contribuir a un mensaje colectivo de tolerancia y respeto. Acto seguido, con orgullo y convicción, izaron la bandera lila, símbolo de la lucha contra la violencia de género.
Estos niños y niñas nos han brindado una lección de valentía y compromiso. Nos invitan a unirnos a su causa, a levantar la voz contra cualquier forma de violencia y a trabajar juntos por un mañana donde el amor y la igualdad sean la norma.
¡Únete a este movimiento de cambio! Juntos, podemos construir un mundo más seguro y justo para todos.